Descrecimiento vs decrecimiento
Primera parte
15 de mayo de 2022
Miguel Valencia Mulkay
La palabra “descrecimiento” es un neologismo,
una palabra inventada en 2007 por nuestro colectivo ECOMUNIDADES, con el fin de
traducir la consigna política francesa decroissance,
utilizada por el movimiento francés nacido en 2001 del mismo nombre.
Después de estudiar el libro Le Pari de la decroissance (La
Apuesta por el decrecimiento, 2006) de Serge Latouche y el libro Decroissance
ou Barbarie (Decrecimiento o barbarie, 2005) de Paul Aries, nuestro
colectivo decide en 2007 adoptar en parte esta consigna política francesa, por el
afortunado rescate que hace de la crítica al crecimiento económico de los años
60 y 70, la crítica a la sociedad industrial realizada en el siglo XX por Iván
Illich, Jean Robert, André Gorz, Jacques Ellul y otros autores que hace casi
medio siglo fertilizaron el nacimiento del movimiento ecologista francés y que han
sido parte muy importante de la inspiración en la acción de nuestro colectivo
nacido en 2005 y de su antecesor, el Foro Regional Ecologista del Valle de
México nacido en 1991. También, por la universalidad de muchas de sus críticas
a las ideas de progreso, desarrollo y modernización.
En este acercamiento al movimiento decroissance,
fueron centrales las aportaciones de Jean Robert quien nos puso en contacto
personal con su amigo Serge Latouche: los unía el pensamiento de Iván Illich.
También, fueron importantes las aportaciones de Dominique Jonard y Claudio
Kermaría, amigos franceses residentes en México que consideraron que el
movimiento francés decroissance podría inspirarnos nuevas ideas
en nuestra acción ecologista y meses antes de que conociéramos la opinión de
Jean, nos regalaron libros al respecto de este movimiento.
Al intentar traducir esta consigna política francesa, nos
dimos cuenta de que su simple traducción al español, como decrecimiento, presentaba muchos
inconvenientes semánticos y semióticos: esta palabra ha estado muy asociada al
lenguaje económico y, en general, al lenguaje científico y tecnológico, y
traduce mal la propuesta cultural del movimiento francés impulsado por Serge
Latouche y Paul Aries que entraña una crítica radical a la economía y a la
ciencia y la tecnología y estudia diversas propuestas para combatir el exceso,
la desproporción, el crecimiento sin límites que tienen el propósito de lograr
que la sociedad llegue a aceptar una reducción voluntaria de las
actividades económicas que más dañan la diversidad biológica y cultural, el
tejido social, las economías y las políticas locales.
Además, ECOMUNIDADES no quería adoptar tal cual las ideas y
propuestas del movimiento francés, no queríamos hacer una simple copia de este
movimiento tan ajeno a la realidad de México o de los países del Sur global,
teníamos ya nuestras propias ideas al respecto de la economía y la cultura. Rechazamos
pues la palabra decrecimiento como opción para nombrar nuestra
movilización contra el crecimiento ilimitado.
Entendimos entonces que tendríamos que realizar un gran
esfuerzo de adaptación, aclimatación o naturalización de las ideas políticas de
Latouche y Aries y de la movilización francesa contra el crecimiento ilimitado
y otras críticas radicales de ese movimiento que nos han parecido virtualmente
universales y también, de aquellas propuestas para inducir un esfuerzo
colectivo que conduzca a reducir voluntariamente las actividades económicas que
más dañan la ecología y las culturas. Reconocimos
que la religión de la economía y el culto a la ciencia y la tecnología colonizan
casi todas las universidades del mundo. Esperábamos que esta crítica y estas
propuestas podrían ayudarnos a frenar la devastación de la diversidad biológica
y cultural y recuperar el Buen Vivir o la convivencialidad en México o en
países del Sur global, parecidos a México.
En esos días necesitábamos una nueva palabra, para designar
la movilización mexicana contra el exceso, la desproporción y el crecimiento
sin límites, así como sus propuestas para defender la riqueza natural y
cultural de nuestro país y, también, para validar alternativas apropiadas a la
situación de cada comunidad, micro cuenca, ecorregión de México y de la Nación
mexicana o de países del Sur global.
Mas tarde, observamos que existen muchas palabras españolas,
con el prefijo des: deshacer, desvestir, descomponer, desligar, desvirtuar y
muchas otras; en español, es una rareza la palabra decrecimiento. De esta
manera aparece en nuestras bocas la palabra “descrecimiento” como
una buena opción, para nombrar al movimiento mexicano contra el crecimiento
sin límites; una buena opción, para cargarla con varios significados o connotaciones que no tiene la palabra decrecimiento,
como son las siguientes: es un proceso cultural en el seno de la sociedad
mexicana o de algunos países del Sur global que se manifiesta en una reducción
voluntaria del exceso, la desproporción y el crecimiento por el crecimiento
mismo pues dañan en exceso el clima, la ecología, el medio ambiente, las
culturas, el tejido social, las economías y las autonomías locales o
ecorregionales. Es un proceso nacido del convencimiento social de la necesidad
de contribuir a esta reducción.
Aprobadas en el seno de ECOMUNIDADES la palabra “descrecimiento”,
y las connotaciones que queríamos darle a esta palabra, procedimos más tarde a proponerlas
a los grupos y organizaciones que participaron entre 2007 y 2008, en el Primer
Ciclo de Coloquios La Apuesta por el descrecimiento, organizado por
nuestro colectivo, quienes los recibieron muy bien y los aceptaron de allí en
adelante. Durante este Ciclo tuvimos conocimiento de la existencia de los
nuevos movimientos contra el crecimiento sin límite, en otros países europeos: decrecimiento(español),
decrescita(italiano) y otros inspirados, también, por el movimiento decroissance.
Al concluir este Ciclo, nace en la ciudad de México el movimiento ¡Descrecimiento
o colapso!
Desde 2008, la consigna “descrecimiento”
quedó abierta a todas las interpretaciones que se puedan hacer
sobre ella, individuales o colectivas, mientras acepten los significados o
connotaciones básicas que se le han atribuido a ella desde ese año. Es la
bandera que hemos utilizado para combatir en México el pensamiento económico-
la religión de la economía- y la ciencia y la tecnología al servicio de la
guerra contra la Naturaleza y contra los pobres- el culto a la ciencia y la
tecnología- así como, contra el crecimiento sin límites, el productivismo, el
consumismo, el militarismo, el racismo y la concentración de poder y dinero.
En 2009 recibí una invitación de la Junta del Klimaforum09 de
Copenhague, cumbre de los pueblos paralela a la cumbre del clima COP15, a
participar en un seminario internacional sobre degrowth, como reconocimiento
a ser uno de los pocos movimientos sociales contra el crecimiento sin límites
en los países del Sur global. Al terminar este evento, el consejo del
Klimaforum09 nos pide promover en México la organización de un evento similar: el
Klimaforum10, paralelo a la cumbre del clima de Cancún, la COP16. Entre
noviembre y diciembre de 2010 celebramos en Puerto Morelos, Quintana Roo, el
Klimaforum10, con la participación de muy distinguidos activistas
internacionales de la Justicia Climática.
A principios de 2010, Latouche viaja a México, por invitación
de ECOMUNIDADES que había promovido conferencias magistrales suyas en la UNAM,
la UAM, el IPN y otras entidades. Luego, Latouche nos pone en contacto con los
organizadores de las conferencias internacionales degrowth
y me invitan a participar en la Segunda Conferencia degrowth realizada
en Barcelona en 2010. Entramos entonces en contacto con algunos representantes
de los movimientos degrowth (internacional, nacido en París 2008),
decrecimiento, decrescita, postwachstum y de otras naciones
europeas.
Hacia 2017 descubrimos que la palabra “descrecimiento”
había sido aceptada por la Real Academia Española y también, que los
organizadores de otras conferencias degrowth, su “Support Group”, había
aceptado apoyar nuestro proyecto de Primera Conferencia Norte Sur de
Degrowth-Descrecimiento, México 2018 que, gracias al apoyo de la Coordinación
de Humanidades de la UNAM y otras entidades tuvo lugar entre el 3 y el 7 de
septiembre de 2018 en el Palacio de Medicina. Ver la página: https://degrowth.descrecimiento.org/
El movimiento “descrecimiento” ha
tratado de sostener sus afirmaciones y propuestas, con fundamento en muchas
teorías con reconocimiento internacional. Ha recogido la crítica de Iván Illich
fuera de México, como conferencista internacional (1977-2002), la propuesta de
nuestro amigo Jean Robert: el “descrecimiento” debería entrañar
la reducción radical del nexo económico entre las personas. Ha recogido las
propuestas de Serge Latouche: “Salir de la economía”, “Descolonizar el
imaginario social”, “Reconceptualizar la escasez y la abundancia y la riqueza y
la pobreza” “Reestructurar las relaciones sociales de producción, “Redistribuir
la tierra, el trabajo y los ingresos entre generaciones” y “Relocalizar la
política y la economía” y ha recogido diversas propuestas presentadas en
conferencias degrowth y de la Justicia Climática y Ambiental.
Para el “descrecimiento”, la sociedad moderna
ya no enfrenta la disyuntiva crecimiento o decrecimiento (recesión), el
crecimiento exponencial de las últimas décadas ha creado las condiciones para
un desquiciamiento global. Enfrenta más bien la disyuntiva decrecimiento(recesión)
o “descrecimiento” (reducción voluntaria de los grandes consumos
individuales): O hacemos algo importante para eliminar el crecimiento por el
crecimiento mismo o crecimiento sin límites o el decrecimiento será la
consecuencia natural de no haber progreso en el “descrecimiento”
(cambio cultural de la sociedad mexicana y mundial)
Descrecimiento vs decrecimiento
En los blogs http://red-ecomunidades.blogspot.com/ y https://descrecimientomexico.blogspot.com/ se puede encontrar algo de lo que ha
sido el descrecimiento.
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