La
sacralización del agua- Dia Mundial del Agua 2020
Se dice que las primeras leyes del mundo tenían como motivo el uso del agua. Hasta la llegada de la tercera o cuarta revolución industrial brotan las "guerras del agua". Con el neoliberalismo se lleva a fondo la idea del agua como una mercancía más sujeta al mercado. Se perdió la antigua sacralidad del agua y se crearon las condiciones para las guerras del agua.
Cada territorio tiene "su agua" es decir: la que permite la existencia de su diversidad biológica; la extracción excesiva de agua destruye el equilibrio ecológico del territorio. El excusado inglés y las grandes bombas y los grandes tubos son los principales enemigos de la conservación del agua. Las grandes presas y los trasvases de agua entre cuencas constituyen grandes atentados contra la conservación del agua. La moderna tecnología del agua ignora totalmente la ecología del territorio. La revolución sanitaria resultó fracasada como la misma revolución industrial es un fracaso.
Canadá, el país con mayores reservas de agua, rechaza la aplicación del TLC a los asuntos del agua y, con Maude Barlow a la cabeza, crea el Council of Canadians para frenar las pretensiones de su gran vecino; Maude publica su famoso libro El Oro Azul que informa mundialmente la nueva situación del agua. En Cochabamba, Oscar Olivera encabeza la primera "guerra por el agua" que crea las condiciones, para eliminar la dictadura boliviana.
Se privatiza la distribución de agua en varias ciudades de México, como Saltillo, Puebla y otras. La Ciudad de México entrega parte de su servicio público de agua a empresas privadas. El Banco Mundial ofrece préstamos blandos, con el fin de que los municipios y las ciudades entreguen sus servicios públicos de agua a empresas privadas.
México abandona, desde la época de Salinas, el cuidado del agua municipal, el agua entubada, para propiciar el consumo de agua embotellada y consigue en esos años el primer lugar en consumo de refrescos y de agua embotellada, seguido muy de cerca por Italia. Las botellas de plástico vacías invaden todos los rincones del país y se descubren las grandes islas de plástico en los océanos. El agua embotellada como cualquier alimento industrializado se convierte pronto en alimento chatarra, sin el sabor que le daba su origen territorial.
La jurisprudencia mundial se niega a concederle sacralidad al agua tal como lo hace con el ser humano. La jurisprudencia de Estados Unidos se decanta en cambio por la privatización del agua.
La Ley debe reconocer la sacralidad del agua y prohibir su mercantilización y su gestión extraterritorial
La
sacralización del agua- Dia Mundial del Agua 2020
Miguel
Valencia Mulkay
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